La sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), promueve como herramienta y guía alimentaria la pirámide de la alimentación saludable, utilizando como modelo la dieta mediterránea por sus características nutritivas y gastronómicas, haciéndola óptima para mejorar la salud y la nutrición.
La pirámide en cuestión enseña que la variedad, las raciones y el equilibrio son elementos esenciales que favorecen una alimentación saludable, manteniendo el peso corporal adecuado. Consta de 6 niveles, encontrándose en su base los requisitos básicos para un estilo de vida saludable, focalizando en la salud mental (en los que se observa que los estados de ánimo pueden influir en lo que se come y cómo se come) y física (la incidencia de la actividad física como elemento necesario para mantener un sistema inmunológico y cardiovascular sanos) así como la ingesta de agua de 4 a 6 vasos al día, el balance energético, debe existir un equilibrio entre lo que se consume y lo que se gasta, así como la cantidad de las raciones que ingerimos, recomendándose 5 comidas diarias, y pone en relevancia las técnicas culinarias, siendo la cocción al vapor la recomendada, hervidas y/o al horno, y aconseja evitar las frituras. En los niveles segundo y tercero de la pirámide se encuentran los alimentos que se deben consumir diariamente como los hidratos de carbono (pan, pasta, arroz, harinas integrales, legumbres tiernas), patatas hervidas o al horno. Frutas (3-4 veces al día) y verduras y hortalizas (2-3 veces al día). Debiendo sumar un mínimo de cinco raciones al día en total. Y el consumo de aceite de oliva virgen extra.
En el cuarto nivel se encuentran los lácteos (2-3 veces al día), mejor semidesnatados o bajos en grasa, asimismo se aconseja de 1 a 3 veces al día y alternando, las carnes blancas (pollo, pavo o conejo), los pescados de temporada; las legumbres, los huevos y los frutos secos (priorizar naturales y sin sal o azúcares añadidos).
En el anteúltimo nivel y en la cima están los que se recomiendan consumir opcional, ocasional y moderadamente: las carnes rojas y procesados o embutidos, los productos ricos en azúcar, sal y grasas. El consumo de bebidas alcohólicas, no se aconsejan, pero para los adultos que lo deseen, sugieren el consumo opcional de las bebidas fermentadas como la cerveza y el vino, siempre y cuando no estén contraindicadas y acompañadas siempre de comida.
Corona la pirámide nutricional una bandera en la que recomienda el consumo de suplementos nutricionales o alimentarios, aconsejados por un profesional de la salud.
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